Una serie de reuniones de alto nivel entre la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) y un funcionario de la República Popular de China se espera que conduzca a "regularizar" las operaciones para la Iglesia en China.
Una declaración de la Primera Presidencia de la Iglesia divulgada hoy que un alto representante de la República Popular de China - el más alto representante ranking de Beijing para reunirse con líderes de la Iglesia – se ha entrevistado con la Primera Presidencia.
En esa reunión en el edificio de Administración de la Iglesia en Salt Lake City el martes 24 de agosto siguieron reuniones en febrero y mayo en Pekín, al que asistieron de parte de la Iglesia, el Élder Dallin H. Oaks y Élder Donald L. Hallstrom, que son responsables de la supervisión de la Iglesia en Asia, sobre la cesión de la Primera Presidencia. Estas reuniones se iniciaron por el representante chino. 
Los Elderés Oaks y Hallstrom representan dos de los consejos de más alto rango de la Iglesia – El Elder Oaks , de los Doce Apóstoles, y Elder Hallstrom de la Presidencia de los Setenta.
"Es importante entender lo que significa el término regularizando, y lo que no significa", dijo el portavoz Michael Otterson.
Para la Iglesia. "Esto no significa que anticipamos el envío de misioneros a China. Esta cuestión no es ni siquiera considerado. "La Iglesia aprecia profundamente la cortesía de los dirigentes chinos en la apertura de una forma de definir mejor la forma en la Iglesia y sus miembros pueden continuar con sus actividades diarias, todo en armonía con la ley china".
Otterson dijo que muchos detalles deben ser trabajados en nuevas conversaciones con funcionarios chinos, pero que los acontecimientos estaban pendientes en el resultado de 30 años de construcción de confianza mutua con los chinos.
"Estan familiarizado con nosotros a través de numerosos contactos, y han visto cómo nosotros y nuestros miembros operan en China. Ellos saben que somos gente de palabra cuando se trata de respetar la legislación china y las expectativas culturales ", dijo.
La declaración formal y breve de la Primera Presidencia que ellos y otros altos dirigentes en la sede de la Iglesia en Salt Lake City, dice. "han mantenido conversaciones con un funcionario de alto rango de la República Popular de China, de Beijing, y han establecido una relación que esperamos que conduzca a regularizar las actividades de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en China ".
Otterson dijo que dada la importancia de comprender y cumplir con varias leyes chinas y la necesidad de esfuerzos de cooperación en curso, la Iglesia no tiene previsto hacer más comentarios sobre los debates por el momento.
"Al término de la reunión en Salt Lake City, se acordó que sería conveniente que esta información será anunciada públicamente", dijo Otterson.